El embalse de Ulldecona: Paisaje del agua en la Tinença de Benifassà

La presa se levanta en la confluencia del riu de la Sénia y el barranc de la Fou, y se accede a ella mediante la carretera CV-105.

Presa de Ulldecona y la Mola del Convent.

Presa de Ulldecona y la Mola del Convent. / Estepa

Jorge Hermosilla Pla | Jesús García Patón

Estepa. Universitat de València

En el término municipal de la Pobla de Benifassà, en la comarca del Baix Maestrat, se localiza el embalse de Ulldecona. La presa se levanta en la confluencia del riu de la Sénia y el barranc de la Fou, y se accede a ella mediante la carretera CV-105; la distancia con el pueblo de la Pobla es de 11 kilómetros. La construcción del embalse dio lugar al desplazamiento de la antigua carretera, parcialmente inundada. Se trata de la actual CV-105, que conecta La Pobla de Benifassà con el municipio de La Sénia. De este modo, se materializó una variante en esta vía de comunicación que concluyó con la construcción del puente localizado junto al Molí l’Abad.

El riu de la Sénia tiene una longitud aproximada de 50 kilómetros y durante gran parte de su recorrido sirve de límite istrativo entre las provincias de Castellón y Tarragona, además de ser el río más septentrional de la Confederación Hidrográfica del Júcar.

Puente de la CV-105 sobre embalse Ulldecona.

Puente de la CV-105 sobre embalse Ulldecona. / Estepa.

El embalse se extiende por el entorno de la confluencia del barranc de la Fou y el riu de la Sénia, en un entorno montañoso y predominantemente forestal. El relieve está formado por numerosos picos, muelas y peñas que se elevan más de 300 metros sobre la presa, construida a una altitud de 480 metros: Mola Rossa (801 m), Mola de Mangraner (848 m), Mola dels Teixets (946 m), Moleta del Terme (947 m), Roca de Migdia (891 m), Penya de Migdia (841 m), La Tossa (865 m), Penya de l’Àguila (797 m). En su conjunto, el paisaje natural se caracteriza por los relieves montañosos, barrancos y valles estrechos, y el predominio de unas pendientes pronunciadas.

La red hidrográfica está formada principalmente por el riu de la Sénia y su afluente el barranc de la Fou, y es el cauce de este último el que ocupa mayor superficie del agua embalsada. Además, son numerosos los barrancos, de escaso recorrido y elevada pendiente, los que tributan al embalse en ambas márgenes: Barranc de Castellar, Barranc de la Ronyosa, Barranc del Ferri, Barranc de la Moleta, y Barranc de la Tenalla.

Rasgos técnicos de la presa y del embalse

La cuenca de aportación asciende a 95 Km2, la superficie del embalse es de 65 hectáreas y la aportación media anual es de 37 Hm3. La presa es de gravedad, con una cota de coronación de 479 msnm, una altura máxima de 58 m y una longitud total de 180 m.

Visión cenital de la presa de Ulldecona.

Visión cenital de la presa de Ulldecona. / Estepa.

Desde el punto de vista geológico el embalse se encuentra bajo el dominio del Jurásico superior y del Cretácico inferior. Los materiales predominantes son las calizas y margas. En el sector del embalse y espacios colindantes predominan las calizas tableadas y margas de la transición entre los periodos Jurásico y Cretácico. Alcanza un espesor de 50 metros en la zona del Mangraner.

En las colas del embalse, tanto por la parte del Barranc de la Fou como del Riu de la Sénia, predominan las calizas y margas cretácicas.

Antecedentes históricos y transformaciones paisajísticas

Con la construcción de este embalse se pretendía el aprovechamiento de las aguas del riu de la Sénia para el riego. El Sindicato de Riegos de Ulldecona solicitó en 1907 formalmente su construcción. El proceso se dilató en el tiempo: hubo un primer proyecto en 1941 que no se materializó; sin embargo, en 1950 se redactó uno nuevo, que sirvió de base para la construcción de la presa. Las obras se iniciaron el 25 de junio de 1951.

La construcción del embalse dio lugar a cambios del paisaje. Las transformaciones paisajísticas se aprecian en la desaparición de los campos que se encontraban en los márgenes del tramo final del Barranc de la Fou y los de la parte del Riu de la Sénia, anegados por las aguas del embalse. De la misma manera se aprecian unos cambios en el entorno rural, condicionados por la despoblación, con el progresivo abandono de las tierras de cultivo de secano, que han sido reemplazadas por una importante masa forestal.

Este conjunto montañoso junto con la rica variedad de especies vegetales facilitó en 2006 la declaración del Parque Natural de la Tinença de Benifassà. A los valores medioambientales del entorno hay que tener en cuenta la escasa presión demográfica. La población de La Pobla de Benifassà tiene unos 240 habitantes (2024), una superficie de 136 km², y una densidad de 1,49 hab./km². Un desierto demográfico. En 1960, década en la que se construyó la presa, el municipio tenía 470 habitantes, población rural y dispersa, en los distintos barrios, pedanías y numerosos “masos” dispersos por el término, como el Mas d’Abella, Mas de Joan, Mas del Rector, o Mas del Castellar.

Funciones del embalse de Ulldecona

La función original de su construcción fue el regadío. El embalse de Ulldecona suministra aguas para las comunidades de regantes de Ulldecona, Rosell, La Sènia y San Rafael del Río. Debido a los suministros para riegos, las pérdidas estructurales y la sequía, desde 2012 el embalse sufre una progresiva disminución del volumen de agua embalsada, incluso con previsión de agotamiento del mismo. Por ello, se acordó un volumen mínimo de 100.000 m3 de agua almacenada. Las precipitaciones del pasado otoño han recuperado los niveles de reservas de antaño.

El embalse de Ulldecona tiene además una función de laminación, relacionada con una peligrosidad geomorfológica derivada de la presa. Ésta se construyó inmediatamente aguas abajo de la confluencia del riu de la Sénia con el barranc de la Fou. Las aguas se embalsaron, por tanto, en el tramo final de este barranco con dirección Norte-Sur, y el tramo del riu de la Sénia, que tiene dirección Oeste-Este.

El embalse de Ulldecona.

El embalse de Ulldecona. / Estepa.

De la misma manera, se ha desarrollado en los últimos años una incipiente actividad turística en su entorno. La declaración del Parque Natural de la Tinença de Benifassà y la atracción que representa el propio embalse de Ulldecona, han facilitado unas condiciones favorables para la constitución de empresas vinculadas con el turismo rural. Así, es posible realizar actividades acuáticas, hay establecimientos de alojamiento y restauración en las proximidades de la presa, así como áreas recreativas junto al riu de la Sénia.


BIBLIOGRAFÍA BÁSICA

- Paisajes Turísticos Valencianos (2016), de la AVT, dirigido por Jorge Hermosilla.

- Los embalses en el ámbito territorial de la Confederación Hidrográfica del Júcar (2024), dirigido por Arancha Fidalgo y Jorge Hermosilla.

- Atlas Temático de la Comunitat Valenciana (2022 y 2024), del Institut Cartogràfic Valencià, dirigido por Jorge Hermosilla.

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