“Vamos a alquilar un coche para volver a Madrid porque no sabemos cuándo funcionará el tren”

La estación de tren de Joaquín Sorolla está este jueves más llena de lo habitual. El motivo es la interrupción del servicio ferroviario con conexión con Madrid, debido a una salidad de un eje de la cabeza motriz de un tren, que realizaba su entrada en la estación y que ha provocado una pérdida de tensión eléctrica en Chamartín. Desde las 14 horas, se ha detenido el servicio ferroviario entre València y la capital. Cientos de personas esperan sin poder viajar a su destino y sin saber en qué momento se restablecerá la circulación. Se trata de la tercera jornada con retrasos graves en menos de dos meses, tras el 'apagón' eléctrico del 28 de abril y de las incidencias provocadas por el robo de cobre en un tramo de la línea de alta velocidad, calificado de "sabotaje" por el ministro de Transportes, Óscar Puente.

Interrumpida la circulación de alta velocidad en Chamartín por falta de tensión

Enfado, desinformación y prisas es lo primero que transmiten los viajeros. Ante la falta de información, y sin perspectivas de que la circulación se retome en breve, muchos ya empiezan a buscar alternativas. Es el caso de Consuelo Mir, de 70 años, que necesita llegar al aeropuerto de Barajas-Adolfo Suárez antes de las 22 horas; entonces, parte su vuelo hacia Tailandia para disfrutar de sus vacaciones. Por el momento, no han empezado bien. “Hemos intentado alquilar un coche, pero no hay de seis plazas -, explica-. Estamos hablando con familiares para que nos lleven”. Se han dirigido a la empresa de alquiler de vehículos por recomendación del personal de la estación. "Nos han dicho que nos movamos si queremos llegar porque parece que va para largo", añade.

Los que sí que han conseguido vehículo son Fernando González y sus dos compañeros de trabajo que vuelven a Madrid después de una jornada de trabajo en València. Le ha informado su mujer con un mensaje de texto, al leerlo en la prensa. “Nos toca ir en coche para volver a casa por desgracia y no es la primera vez”, explica. Ellos señalan al Gobierno por las deficiencias crecientes del servicio: "Desde hace años, he utilizado mucho el tren, tanto Cercanías como AVE -, explica-. El tren va cada vez peor por la incompetencia del Ejecutivo y los ministros".

Otros no tienen tanta prisa y han preferido optar por esperar a que el servicio se recupere. "Tengo que estar mañana en Madrid para una actuación (es músico) y, por el momento, no tengo urgencia -, comenta Miguel Arriola-. Pero si se alarga, me pensaré coge mi coche para llegar a tiempo".

Sin previsión para retomar el servicio

En este sentido, fuentes de Adif han explicado a Levante-EMVque no tienen una hora prevista para poder restablecer el servicio. El fallo de la tensión eléctrica se ha producido en la estación de Chamartín y, además de la interrupción de la circulación, ha dejado varios trenes en las vías. Por el momento, los técnicos trabajan por "recuperar el tráfico lo antes posible". De hecho, han conseguido recuperar ya la tensión en parte de la estación madrileña, que ha permitido recuperar el tráfico con la zona norte a las 15 horas, aproximadamente. Por el momento, los servicios con dirección al litoral mediterráneo siguen sin funcionar.

Desinformación

El principal problema es la falta de información por parte de las compañías ferroviarias. Unos han recibido un mensaje de aviso y otros se han enterado al llegar a la estación. “No nos dicen nada, solo que nuestro tren saldrá con retraso, explica Estrella Suárez, quien aprovecha para criticar el incremento desde las incidencias desde la liberalización del servicio y la aparición de otras compañías de bajo coste, como Ouigo o Iryo. “Hay mayor saturación de trenes y todos circulan por la misma línea”, comenta. Sobre todo, destaca la indefensión de las personas usuarias ante la desinformación.

Cerca de ella Rocío Leal, madrileña y usuaria habitual del tren por ocio y trabajo, está esperando a ver qué ocurre; de momento, no piensa en una vía alternativa. "Espero no tener que llegar a tanto", comenta entre risas, pese al enfado por el enésimo retraso que vive en el transporte ferroviario. Por eso, también señala el deterioro de la calidad. “El tren antes, cuando solo había AVE, era un medio de transporte extremadamente fiable para llegar a tiempo -, afirma con rotundidad-. Se ha convertido en un medio con muchos problemas”. En su opinión, cree que la eclosión de compañías y el aumento de la oferta está generando más problemas que antes. "Hay un fallo muy grande de los trenes ahora", concluye.