La ermita barroca de Algemesí entra en la lista de patrimonio en peligro tras la dana

Ermitas, iglesias, museos, puentes romanos o barracas tampoco se salvaron de las trágicas inundaciones del pasado 29 de octubre. El agua y el lodo dañaron en mayor o menor medida estos edificios de gran valor patrimonial, por lo que los expertos trabajan a contrarreloj para intentar rescatarlos. Algunos de ellos será difícil que recuperen su imagen previa a la riada.

La ermita de los santos Abdón y Senén de Algemesí fue uno de los centenares de edificios golpeados por el desbordamiento del río Magro en la localidad. Debido a su estado, e inmueble, ubicado en el centro del municipio, fue incluido el 14 de febrero de 2025 en la Lista Roja de patrimonio español en peligro, creada por la asociación española sin ánimo de lucro Hispania Nostra. 

La capilla de estilo barroco, declarada Bien de Relevancia Local, está, según la entidad, «en un estado de conservación lamentable, que no permite su uso o contemplación». En la descripción, Hispania Nostra indica que las puertas se encuentran «totalmente destrozadas, dando paso al vandalismo». La bóveda también ha caído recientemente, por lo que deja al edificio «al acecho de las inclemencias del tiempo». 

La trágica dana, a su vez, ha hecho todavía más mella en esta espacio, ya que ha terminado de derribar las puertas, su interior y los muebles que se encuentran dentro. La humedad, por su parte, «sigue imperando» y, por lo tanto, sigue «consumiendo lo poco que queda del edificio». 

Con el fin de revertir esta situación, los expertos denuncian que el espacio «necesita una inversión y una respuesta urgente del Ayuntamiento de Algemesí y de la basílica Menor de San Jaime Apóstol». 

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Historia

El inmueble de pequeñas dimensiones y encajado entre dos edificios fue construido, según cuenta la tradición local, tras una promesa realizada por un carlista que se ocultó en este espacio durante su huida de los isabelinos. El implicado, al conseguir salvarse, podría haber construido el templo. No obstante, la tradición podría no ser totalmente cierta, ya que el Plan General de Ordenación Urbana de Algemesí data su edificación, y la construcción del retablo cerámico que se ubica en él, entre los años 1810 y 1820. 

La ermita cuenta con una fachada sencilla y con una puerta de rectangular, adintelada y en cuyas hojas de madera se encuentran postigos y mirillas. Sobre esta, se halla el retablo cerámico con las imágenes de los titulares con su habitual iconografía, vestidos con indumentaria romana, coronados y con las palmas del martirio, portando un racimo de uvas y unas espigas y un león agachado. Sobre el alero del edificio, se eleva la espadaña con campana y una veleta con las siluetas de los santos.

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El interior del edificio dispone de planta rectangular, con piso ajedrezado y con paramentos realizados en mampostería de ladrillo. La ermita está cubierta por bóveda de arista dividida en dos tramos por un arco fajón. En la cabecera, los visitantes pueden encontrar un pequeño altar barroco donde figuran las imágenes de San Abdón y San Senén, obra de Inocencio Pérez Cuesta, las cuales son posteriores a 1940.

La inclusión de la ermita de Algemesí eleva a siete las construcciones históricas en la comarca incluidas en esta lista por su elevado riesgo a desaparecer. Completan el catálogo, la Casa o Masia dels Frares de Guadassuar, el edificio modernista de l'Hort de Feliu de Alginet, la torre y ermita de Sant Miquel de Corbera, el castillo situado en este mismo municipio, la Granja de Sinyent de Polinyà y las ruinas del monasterio de la Murta. La asociación sin ánimo de lucro exige a las istraciones competentes que actúen para cambiar la situación.

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