Del olvido a las plataformas: la extraña (y anónima) vuelta de la joya del rock valenciano

Si el pop y el rock valencianos —y en valenciano— tienen un disco de culto, ese es sin duda “Humitat relativa”, de Remigi Palmero. Grabado en 1978 en los históricos estudios Tabalet, dirigidos por Lluís Miquel Campos, y publicado un año después por el sello Pu-Put! (filial barcelonesa de la discográfica Zafiro), este álbum forma, junto a “Brossa d’ahir” de Pep Laguarda i Tapineria (1977) y “Cambrers” de Julio Bustamante (1981), una especie de triunvirato del rock mediterráneo hecho desde València. “Es tan intenso, tanta es su luz y tanto el calor que irradia, que escucharlo es como mirar al sol con los ojos abiertos”, decía de él Juan Puchades en el artículo que le dedicó en “Los 100 mejores discos del rock español de los 60 y 70”.

Pese a que en su momento apenas vendió unos cientos de copias, "Humitat relativa" ha permanecido entre los álbumes más influyentes del pop estatal. Su mezcla de estilos —folk, rock, jazz, funk— con sonoridades latinas, africanas y flamencas, la clara reivindicación de la cultura y el paisaje propios, y el uso del valenciano con una intención más lúdica que política, convirtieron este debut en solitario de Palmero (exmiembro de Els 5 Xics) en una referencia esencial para artistas posteriores como Òscar Briz, Antònia Font, Manel, Arthur Caravan, Els Jóvens o Sénior i el Cor Brutal.

"Con ´Humitat relativa´ queríamos contestar a la Nova Cançó, que era plana y aburrida"

Cien euros por disco

Hoy en día, en tiendas especializadas y plataformas como Discogs, las copias originales del álbum pueden alcanzar los cien euros. Algo más económicas (en torno a los 25 euros) resultan las ediciones en vinilo y CD que el sello de Gandia La Casa Calba reeditó en 2018, a partir de un máster original conservado en los archivos de Sony en Nueva York, actual propietaria del catálogo de Zafiro, y con él, de las ediciones de Pu-Put!.

Aquella reedición —de la que Palmero acabó desvinculándose— sirvió para poner de nuevo en valor la calidad y vigencia del disco, aunque tampoco entonces las ventas alcanzaron cifras significativas. “Humitat relativa” sigue siendo considerado uno de los mejores discos del pop valenciano y español, pero continúa estando en pocas manos.

Además de los discos originales y los de la reedición, canciones como "Plens de sol de bona matí", "L'olor a garrofa" o "Ràdio Alger" solo se podían encontrar como vídeos sonoros en Youtube. Ahora, los melómanos tienen una nueva oportunidad para escucharlas a solo un "click" de sus ordenadores y dispositivos, ya que “Humitat relativa” ha aparecido en las dos principales plataformas de streaming: Spotify y Apple Music. Lo ha hecho, eso sí, en una versión distinta de la que remasterizó La Casa Calba, con un sonido algo precario. Incluso alguno de los cortes presenta saltos o defectos propios de una fuente original mal conservada.

¿Quién lo ha subido?

¿Y quién ha subido el disco a las plataformas digitales? En los créditos de Spotify y Apple figura el sello Pu-Put!, aunque desapareció a principios de los años 80, casi dos décadas antes de que Zafiro (su matriz) fuera absorbida por RCA, filial de Sony. Lo que está claro es que no ha sido La Casa Calba —que solo obtuvo licencia para editar el máster en formato físico— ni tampoco el propio Remigi Palmero, según confirmó este lunes desde su casa en Alginet al diario Levante-EMV.

El músico mantiene una relación compleja con la que todos coinciden en considerar su obra maestra, ya que, para él, sigue siendo un disco inacabado. “Lo que se publicó fueron las premezclas en las que estábamos trabajando en los estudios Tabalet”, explica. “Vinieron los de Pu-Put! desde Barcelona para conocer el estudio de Lluís Miquel, escucharon las grabaciones y les gustaron. Lo siguiente que supe fue que Lluísmi se las había vendido, y que tenía que ir a Barcelona a cobrar las 500.000 pesetas que nos iban a dar”.

Un disco de aprendizaje

Palmero recuerda aquel trabajo como un “experimento casero”, un “proceso de aprendizaje” en el que él, Pep Laguarda y Julio Bustamante querían hacer pop-rock europeo con un toque psicodélico. “Pero de repente aparecían cinco músicos africanos y se ponían a tocar”, añade. Pese a todo, reivindica su carácter innovador, sobre todo en la manera de mostrar cómo el valenciano podía ir más allá de la cançó y su marco político. “Éramos cuerpos y culos que lo que querían era moverse, pero al final también demostramos que el valenciano tenía mucho territorio musical por recorrer”, resume.

Hace tiempo que Palmero no gana dinero con “Humitat relativa”, ni lo hará ahora con sus reproducciones en streaming. Aun así, se siente “recompensado” por la trascendencia que el disco ha alcanzado para cierto público, y por la posibilidad de que, por fin, “pueda llegar a más gente”.

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