El registro de ADN ya permite identificar el 54 % de las heces de perros en Albalat de la Ribera

El Ayuntamiento de Albalat de la Ribera, en colaboración con la empresa especializada ADN Canino, ha presentado los últimos resultados del registro genético canino implantado en la localidad, con datos que confirman los buenos resultados de esta innovadora herramienta de control. A través del análisis de ADN de los animales, el municipio ha logrado consolidar un sistema que, por un lado, contribuye a mejorar la limpieza urbana y, por otro, promueve una tenencia responsable de mascotas.

El censo genético municipal ya cuenta con 380 perros identificados genéticamente, lo que representa entre un 60 y un 70% de la población canina total estimada en el término municipal, según los datos del Registro Supramunicipal de Identificación de Animales de Compañía de la Comunidad Valenciana (RIVIA). Solo en los primeros meses de 2025 se han inscrito 53 nuevos animales, una cifra que refleja el compromiso de los propietarios y la eficacia de las campañas informativas impulsadas desde la concejalía de Medio Ambiente.

"La disminución de deposiciones caninas en la vía pública es evidente"

José Antonio Roig

— Alcalde de Albalat

Estas campañas —que han incluido el envío de postales personalizadas, sesiones informativas y la colaboración estrecha con la Policía Local— han sido determinantes para aumentar la concienciación ciudadana y fomentar el cumplimiento del censo obligatorio.

"El proyecto está dando resultados objetivos y medibles, tanto en la mejora de la salubridad urbana como en la implicación responsable de los propietarios de perros. La disminución de deposiciones caninas en la vía pública es evidente", ha declarado el alcalde de Albalat de la Ribera, José Antonio Roig, quien ha destacado también el impacto positivo que el sistema tiene en la convivencia vecinal.

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Más infracciones detectadas gracias a la identificación genética

Uno de los aspectos más relevantes del balance de este año es el aumento en la eficacia de la identificación de infractores. El porcentaje de muestras de heces recogidas que han podido ser asociadas a un perro registrado ha pasado de un 44% en 2024 a un 54% en 2025, una evolución significativa teniendo en cuenta que en 2023 esta cifra era solo del 4%.

Este incremento se debe no solo al mayor número de animales registrados, sino también a la mejora en la calidad de las muestras recogidas. Actualmente, la Policía Local realiza controles aleatorios en la vía pública y recoge una media de seis muestras de heces al mes, que se remiten al laboratorio para su análisis. Cuando una muestra coincide con un perro censado, se inicia el correspondiente proceso sancionador contra el propietario.

Otra mejora destacada en el proyecto ha sido la reducción drástica de las muestras nulas, aquellas que no contienen ADN de calidad suficiente, que han pasado de representar el 19% en años anteriores a solo un 4% en 2025. Esto ha sido posible gracias a los nuevos protocolos de recogida, transporte y conservación de muestras diseñados conjuntamente entre el ayuntamiento y ADN Canino.

La concejalía de Medio Ambiente valora especialmente este avance técnico, ya que contribuye a agilizar los procedimientos y a garantizar que cada infracción pueda sancionarse con todas las garantías legales.

Objetivo: llegar al 100% del censo

Con este balance positivo, el ayuntamiento y la empresa concesionaria del servicio se marcan ahora el objetivo de alcanzar el 100% de animales censados en los próximos meses. Para ello, se prevé intensificar las campañas de información, mejorar los canales de comunicación con los vecinos y reforzar la vigilancia en zonas sensibles.

"El objetivo ahora es seguir trabajando para alcanzar un censo completo y reducir todavía más las infracciones, protegiendo el entorno urbano y fomentando una tenencia responsable", señalan fuentes de la concejalía de Medio Ambiente.

La experiencia de Albalat de la Ribera se suma así a la de otros municipios valencianos que han optado por incorporar la genética al control de la convivencia animal, y se consolida como un modelo de referencia a nivel autonómico en la lucha contra el incivismo y en la mejora de la salubridad urbana.