Piden tres años de prisión a una mujer por apropiarse de 150.000 euros de su marido tras sufrir un tumor cerebral

Un paciente terminal, unas transferencias ordenadas en la fase final del enfermo y unos herederos que reclaman los 149.400 euros que su padre acumulaba en una cuenta, y que fueron transferidos en dieciséis operaciones a la cuenta privativa de su esposa, con la que mantenía una relación sentimental desde hacía 27 años. Bajo ese pretexto, la Audiencia Provincial de Valencia ha juzgado este martes a una mujer acusada de un delito de apropiación indebida por el que el Ministerio Fiscal solicita una pena de tres años de prisión.

Los hechos se produjeron entre julio y octubre de 2019, días después de que el hombre fuera diagnosticado de un tumor cerebral que no tenía cura y que predecía un "final rápido". Durante este tiempo, se realizaron hasta dieciséis transferencias de manera telemática, a través de banca a distancia, desde la cuenta privativa del hombre a la de la mujer, por importes de entre 900 y 15.000 euros. Unos movimientos que se hicieron "en beneficio propio de la mujer y en perjuicio de sus dos hijos", aprovechando "la situación de vulnerabilidad" del fallecido, quien, debido a su enfermedad, era incapaz de "conocer y comprender la realización de operaciones de disposición y istración de dinero y consentir, libre y válidamente, sobre las mismas", según ha destacado la fiscal.

Obsesión por disponer del dinero

La acusada, que se ha negado a responder a las preguntas de la acusación, ejercida por la letrada penalista Patricia Cogollos, ha alegado que se trata de una riqueza "que hemos cosechado entre los dos durante toda nuestra convivencia" y ha justificado que se pasó de una cuenta a otra "porque él sabía que iba a morir". Ha sostenido, además, que su esposo no quería que esos ahorros, que acumulaba en unos fondos de inversión, fueran para sus hijos "porque estaba muy enfadado con ellos" y "quería que ese dinero fuera para mí".

Sin embargo, sus hijos han alegado que su padre "claramente no tenía capacidad para tomar esa decisión", y destacan la realizada el 29 de octubre, por un importe de 2.000 euros, dos días antes de que este falleciera y estando en una "fase agónica". Durante sus respectivas comparecencias, ambos han asegurado que mantenían "muy buena relación" con su padre, quien "quería que todo fuera para nosotros". Han itido, eso sí, no lo visitaron mucho durante el tiempo que estuvo enfermo "porque es un hombre muy especial" y querían "respetar su voluntad" de que nadie le vea en ese estado de deterioro derivado por la enfermedad.

La hija ha declarado que fue conocedora de los hechos tras requerirle la gestoría un extracto con todos los movimientos de todas las cuentas bancarias de su progenitor, que tenía hasta ocho cuentas distintas. Tras solicitarla en la sucursal, el director le alertó que había detectado que estaba pasando "algo raro" en la citada cuenta, que se estaba quedando cero. Además, el banquero, por su parte, ha afirmado que su cliente "no hacía jamás ninguna operación online" y que le llamó la atención que realizara los reembolsos sin consultarle, "como solía hacer". Igualmente, ha remarcado la "obsesión" y la "prisa" de la mujer por disponer del dinero "antes del 31 de diciembre, algo "imposible" por los trámites que conlleva, por lo que esta llegó a presentar varias reclamaciones.

"Es prácticamente imposible que lo hiciera solo"

Una de las médicos que ha testificado ha señalado que el tumor que le fue diagnosticado al paciente, del que no quiso tratarse, acarrea "un deterioro mental y físico de una forma muy rápida" y considera que es "prácticamente imposible que una persona en esas condiciones pudiera realizar transacciones de manera online". Así con todo, el neurólogo ha destacado que no se pudo acreditar una pérdida de capacidad cognitiva del hombre, "al menos durante los primeros meses".

Tras escuchar a todas las partes, la fiscal ha mantenido la solicitud de tres años de prisión por un delito de apropiación indebida al ver acreditado que el dinero "no fue voluntariamente extraído de la cuenta de este señor a la de la ella" y ha remarcado que las transferencias "fueron realizadas con ayuda de otra persona". La acusación, por su parte, reclama también el reembolso del dinero a los herederos mientras que la defensa ha pedido la absolución de la mujer al no ver acreditados los hechos que se le imputan.